miércoles, 1 de agosto de 2012

El Padre

Tangente
Por Oscar Diaz Salazar

“Con la familia no te metas” es una recomendación que me han hecho ya en varias ocasiones, a propósito de algunas notas que he publicado en las que reseño la vida y obra de los parientes incómodos que tienen los políticos y servidores públicos. 

La recomendación es muy apropiada, es correcta, sensata y en ocasiones es de buena fe… pero en muchas de las ocasiones el exhorto a no ocuparme de la parentela de los políticos la he recibido de los defensores oficiosos de las autoridades en turno. 

Acepto que a mi no me gustaría que criticaran a mis familiares, en especial si la revelación de sus defectos o malas acciones estuvieran motivadas por lo que yo hago, digo o escribo en el ejercicio de mi labor periodística. 

En las muy contadas excepciones en las que involucro a mis familiares en mi trabajo, lo he hecho conciente del riesgo que eso implica… aunque debo aclarar que yo no utilizo recursos públicos para escribir o divulgar mis opiniones. 

Carlos Salinas fue criticado por la actuación de su hermano Raúl Salinas “El incomodo” porque permitió que este ultimo le metiera mano a recursos de los contribuyentes y le brindara protección y cobertura a diversos negocios ilícitos. 

Vicente Fox fue duramente criticado porque su esposa Marta Shagun y sus hijastros hicieron negocios al amparo del poder y desde el gobierno. 

Ambos mandatarios de triste memoria fueron los causantes de las criticas a sus familiares. 

Ellos empezaron el ciclo dándole poder a sus consanguíneos o cónyuges para hacer y deshacer en el gobierno. 

La crítica fue posterior a los actos, fue consecuencia y no causa. 

Considero que en Tamaulipas tenemos un pariente incomodo, un familiar del titular del poder Ejecutivo que utiliza los recursos públicos puestos al cuidado de su consanguíneo para propósitos personales: me refiero al Dr. Egidio Torre López padre del gobernador. 

Al señalar al Dr. Torre como familiar que utiliza el cargo y la influencia de su familiar, en este caso su hijo, para sacar algún provecho, no me refiero a la presunta sociedad de negocios que sostiene con el vocero del gobierno, y con su yerno, los que supuestamente se asociaron para operar una empresa comercializadora que provee de diversos productos a la administración estatal, y cuyo domicilio fiscal u operativo esta registrado en una propiedad del galeno. 

Lo visible, lo que es público y evidente es el uso del aparato de comunicación social del gobierno tamaulipeco para ensalzar la imagen del padre del gobernador Torre. 

De tres a cuatro ocasiones por semana se redactan boletines en los que menciona al Primer Papá de Tamaulipas, se captan graficas y se distribuyen para su publicación en todos los medios de comunicación con los que se ha establecido un convenio para la difusión de las actividades del Ejecutivo. 

El Dr. Egidio Torre parece el Director bis del Instituto Tamaulipeco del Deporte pues de ordinario cumple la tarea de presidir actos que organiza el Instituto o en el que se invita a las autoridades deportivas del gobierno de Tamaulipas. 

Tan solo por esta razón, por utilizar el aparato de difusión del gobierno para dar publicidad a un particular, a un individuo que no tiene responsabilidades gubernamentales, es valido afirmar que el familiar del mandatario Torre Cantú esta haciendo uso indebido de los recursos públicos. 

Es probable que en esta situación el Dr. Torre, persona honorable según me cuentan amigos victorense que lo conocen de mucho tiempo atrás, solo sea una victima involuntaria de los afanes de halagarlo del titular de la oficina de comunicación social. 

Tal vez el Medico Torre López solo sea responsable de esta situación por omisión, por dejar que el Sr. Guillermo Martínez le rinda culto a la personalidad de quien se ha convertido en su asidera (junto al cuñado Basave) a su chamba oficial de jefe de prensa… y a la clandestina de proveedor a trasmano del gobierno.

En la siguiente entrega les hablaré de otro caso similar relacionado con el baile urbano.