TANGENTE
Por Oscar Diaz Salazar
Varios son los opinadores profesionales, especialmente los que simpatizan con el PRI, los que en las ultimas semanas se han pronunciado a favor de que la presidenta municipal electa de Tampico, Profra. Magdalena Peraza, se abstenga de elegir a sus colaboradores, en forma exclusiva, del universo de políticos, servidores públicos, o simplemente ciudadanos con carnet del Partido Acción Nacional.
Una recomendación similar a la que le hacen en sus escritos periodísticos a la futura alcaldesa tampiqueña, aunque esta en tono de reclamo airado, le han hecho al presidente de la republica, Felipe Calderón Hinojosa por haber invitado a colaborar al gabinete federal a puros panistas.
Al presidente espurio le reprochan que gobierne con panistas y-o con amigos, que también son panistas, como era de esperarse en un hombre que se dedica desde la temprana juventud a hacer política en las filas albiazules.
Para darle un matiz de objetividad a la sugerencia, también partidista y favorable al PRI, de integrar a individuos provenientes de todas las corrientes ideológicas y de militancia diversa, se recurre al argumento de los mas aptos, de los mas capacitados, de la experiencia acumulada, del talento que no se aglutina en un solo partido.
La necesidad de representar a todos y cada uno de los sectores que integran la sociedad plural del Tampico actual, es otra frase que con ligeras variantes he leído en los últimos días, en los que se han multiplicado las voces para sugerirle a la presidenta que llegó al cargo con las siglas del PAN, que se abstenga de gobernar con los panistas.
Argumento similar al que le comento, ese de pedirle colaboradores de militancia e ideología “tutti frutti” a los gobernantes panistas, también se lo plantearon en su momento al exalcalde de Reynosa, Francisco Javier García Cabeza de Vaca.
Paradójicamente los panistas se quejan amargamente de su presidente Calderón, porque desde su punto de vista, - punto de vista fácilmente demostrable en su veracidad – a diez años de que Vicente Fox sacó al PRI de Los Pinos, los priistas siguen ejerciendo la mayoría de los cargos públicos de la federación, con la excepción de los de primer nivel.
Traigo a colación estas historias porque me parece injusto lo que escriben muchos de mis coplegas a quienes no les he leído o escuchado, ni de casualidad, una recomendación a un alcalde priista o al gobernador electo Egidio Torre Cantu, para que integre a su gabinete a miembros de otros institutos políticos ajenos al PRI.
La posibilidad de sumar opositores de mentiritas, por lo menos de Ciudad Victoria, no es una opción con la que cuente Egidio Torre, en razón de que los políticos comisionados por el sistema para trabajar en la oposición, ya salieron del closet y se integraron al equipo de trabajo del actual gobernador y del alcalde Arturo Diez Gutiérrez.
Regreso con el asunto del trato inequitativo que le brindan al Gobernador Egidio Torre, pues al futuro mandatario tamaulipeco nadie le ha advertido que no es conveniente gobernar con puros tricolores, no le han sugerido que valore la conveniencia de invitar a colaborar a perredistas, panistas, petistas, panalistas y convergentes.
Solo para equilibrar o mediar en este asunto y como un intento de subsanar ese error u omisión, de seguro involuntario, en el que han incurrido algunos colegas y asesores oficiosos (gratuitos, para que no se ofendan) me atreveré a recomendarle al próximo gobernador del Estado que invite a trabajar con el (invítame a robar, dice el chiste) a militantes de otros partidos diferentes al suyo.
Que le parece Cabeza de Vaca para la Secretaria de Desarrollo Social, Jorge Sosa Pohl para Director de los Penales, Maki Ortiz para la Secretaria de Salud o Emiliano Fernández para CEAT y Ceniceros para la representación en Nuevo León
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