Por Jorge Pensado
El liderazgo que representa Humberto Moreira en el PRI, es el reflejo de una década de gobernadores empoderados por la transición política de México, que ante la falta de una fuerza superior a la de ellos, o instituciones que equilibren el poder, literalmente se adueñaron de su entidad y de su presupuesto.
Cohauila, Veracruz, Oaxaca, Sonora, Chihuahua y desde luego Tamaulipas, todos coincidentemente priistas, son reflejo de ello y el crecimiento de la delincuencia a la par es una correlación que resta libertades y oportunidades a los ciudadanos.
Por lo que resulta cínico el discurso ---y mas parecen bravuconadas--- del presidente electo del PRI, olvidando pronto o pensando que los coahuilenses no viven con inseguridad, pobreza y marginación a causa del gobierno corrupto y visceral que encabezó, que hasta el insólito de la política reciente, dejará a su hermano al frente de su entidad sin que nadie pueda oponerse.
En contraste con una Beatriz Paredes sobria, calculadora, mesurada, políticamente correcta, que construyó lo que el PRI puede presumir el día de hoy en los últimos seis años, saliendo a reflectores sólo en caso de que la propia estrategia política asì lo demandara.
El perfil de uno y otro es el adecuado para la tarea encomendada, adecuado en el tiempo político, sin embargo si Peña Nieto piensa gobernar y si lo dejan llegar, con estos ex gobernadores, mas que pronto México perderá lo poco o mucho que se avanzó en diez años de panismo.
En tanto en Tamaulipas los primeros 15 días del gobierno que encabeza Egidio Torre Cantú, para propios y extraños se perciben bien y animan a pensar que los tiempos del obscurantismo quedaron atrás.
Entendiendo por obscurantismo lo opuesto al libre pensamiento y la sistémica oposición al progreso, así como negar desde el poder los derechos cívicos y civiles de los gobernados.
Y tan atrás los quieren dejar quienes más cerca estuvieron o se enriquecieron de esos años de obscuridad y perversión, que son los primeros que en todo tipo de tertulia señalan lo tanto que se robó y el estado de endeudamiento en que dejó Geño a la entidad.
Esta falsa sociedad, la misma que hace tan sólo 16 días enaltecía a la pareja real y se desasía por señalar todo tipo de elogios, hoy son los primeros en querer borrar lo antes posible esa relación para empezar a construir en este sexenio las escaleras que los acerquen al presupuesto.
Expresiones como que rebasó todo lo imaginable y aceptable, que se enriqueció desmesuradamente en seis años, que atacó de raíz las buenas costumbres políticas o que robó a manos llenas , son las frases que quienes fueron sus principales defensores hoy lo repudian y señalan con el dedo índice.
Otros menos, están que no saben debajo de que mesa meterse y son los primeros en negar como San Pedro a su Dios o Rey en este caso, su relación y amistad.
Son pocos los que defienden lo indefendible, entre otras las señoras que se hacen llamar pomposamente Barbies y que el día de hoy en sus tertulias se mofan de que llegaron las chancludas al DIF y los vejetes a las secretarias.
La sociedad mas que pronto esta juzgando y dándole el lugar que se merece a cada quien.
En otro orden de ideas en las próximas semanas se deberá elegir a tres consejeros electorales, decisión que dará expresión a la idea de democracia con la que profesa el Gobernador, ya que el IETAM es hoy, como mala herencia de este obscurantismo por el que atravesamos en la última década, un bastión priista que en nada representa a la sociedad, ni comulga con las prácticas democráticas que exige un estado de derecho.
Así que si los diputados no se hacen bolas, tienen dos buenas opciones en las personas de los licenciados y especialistas electorales Jorge Manatou Saucedo y Armando Charles Lumbreras, quienes en el tiempo han demostrado conocimiento y experiencia.